Editorial Nº 98

El hombre con la biblia en las manos (sangre de mi sangre)

El anuncio de un embarazo en un buen número de familias ocasiona una gran algarabía, ya que de manera directa o indirecta augura a cada uno de sus miembros, fertilidad, cosecha, milagro, eternidad.

El niño es la esencia pura de divinidad, un papel en blanco, una masita amorfa lista para ser moldeada con cuidado, sabiduría y amor para alcanzar así el atributo de obra de arte. ¿Es el pensamiento de Dios quien determina el destino de un hombre? o ¿es el destino de un hombre quien determina el pensamiento de Dios?

En esas pequeñas cabecitas aguardan enormes sueños, hay barcos complejísimos cuyo número y color dependen de las hojas de un cuaderno. El pirata con un parche de color azul , partirá en un día de lluvia, cuando el estanque esté bien llenito.

Era un día cualquiera, había un calor siniestro, los rayos de sol parecían apoderarse de la tierra, desde la sombra pensé que cualquiera podríamos morir calcinados, de pronto lo vi, era un hombre joven, estaba parado firme, a la manera de una estatua, no desafiaba al sol, creo, más bien, le ofrecía su sacrificio. En sus manos tenía una biblia abierta, leía y luego elevaba la cabeza, quizás en parte como oración o muy probablemente porque allí arriba, en algún cuarto se encontraba su hijo.

Sí, ese día cualquiera, pasaba yo por la acera que permite observar de frente al Hospital Infantíl de México, Federico Gómez. ¿Existirá mayor dolor que el ver a un hijo postrado en una cama víctima de un padecimiento?, ¿mayor impotencia que luchar en ese particular caso con la antítesis de la vida?

Lee mi soldado, lee, si es posible cada página de esa tu biblia, no te rindas, mira que poco es lo que el  hombre conoce, es tu fe y no las matemáticas la que modificará la gráfica, el torrente de tu sangre arrasará a los valores probabilísticos y en corto verás correr, saltar o hasta volar a la sangre de tu sangre.

Señora, señor, bendigo el amor que le profesa a su pequeñito, sí, es diferente, tiene su pielecita gris y su pelito electrizado, el tratamiento los hace ver así, conocieron muy pronto al “emperador de todos los males, pero por lo demás, su corazón es como el de cualquier otro niño, abrazan con ternura a sus muñecos, brincan de alegría con los globos y los payasos que vienen al hospital por el día del niño, y qué decir en las navidades!. Directores, autoridades, no dejen de traer piñatas.

Los hay muchos, dicen ser ateos, máxime cuando son neurocirujanos, ya que es difícil creer en un ánima cuando las lucecitas de nuestras neuronas se apagan, a todos ellos mis respetos, no tengo el menor de los derechos para juzgarlos

Este es un pequeño homenaje a ese hombre estoico, lleno de fe, lleno de amor, lleno de esperanza, el cual tenía una biblia en las manos. Quien quiera que hayas sido, deseo con todo lo que humanamente soy, que ese pequeñín al que aguardaste por meses esté de vuelta en su barco pirata.

Que este sencillo escrito se extienda también a los pequeñitos grises, con pelito electrizado, después de todo la vida puede ser un solo día y en un día Hiroshima y Nagasaki se convirtieron en cenizas

P.D. “Nunca supe hacer poemas, sólo sé cantar y a mí me gusta esta canción, es poquita cosa, es ingenua, es para ti, es una simple canción, de amor” (Juan Carlos Calderón)

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Desde mi punto de vista, los patólogos son los médicos mas completos de la medicina. Debemos tener conocimientos de ciencias básicas y de casi todas las ciencias clínicas, por tal motivo podemos generar proyectos utilizando las dos ciencias, somos el tronco del conocimiento en donde las raíces son las ciencias básicas y las ramas las ciencias clínicas.

13 Comentarios

  1. UPS… QUE BELLO TEXTO.. SALUDOS QUERIDA DOCTORA…

  2. Hospital Infantil de Mexico Federico Gomez, que lugar tan duro para los medicos y residentes tambien, no solo para los padres de los enfermos. Yo me cambie ha patologia despues de solo 6 meses de vivir ese hospital como residente…

  3. Lorena Villarreal

    Extraordinario mensaje!!! Cuanta sensibilidad. La felicito Dra. Isabel

  4. Gabriela Martínez

    Bello homenaje Dra. Alvarado.
    Trabajar en un Hospital pediátrico después de años de hacerlo en uno de adultos me ha hecho ver que el patólogo no es tan frío como dicen, lágrimas han rodado cuando toca hacer una autopsia de un pequeñín que hasta se parece al mío.
    La enfermedad no tiene edad, color, estrato social ni religión.
    Los patólogos seguiremos ahí detrás del diagnóstico para apoyar en lo que se pueda a estos guerreros que están detrás de nuestras láminas.
    Saludos.

  5. Lillian Romero MAP

    Gracias!
    Siempre es un placer leerla.

  6. Svetlana Kotliarova

    Doctora, Usted sin duda es una gran docente y la respeto y admiro mucho; sin embargo vamos a dejar a las deidades y creencias personales fuerta del àmbito de la docencia. Gracias.

  7. isabel alvarado cabrero

    Estimados todos, muchas gracias por sus comentarios, mismos que me ayudan a fijar mi rumbo. Estimada Dra. Kotliarova, la editorial no está destinada a alabar a alguna deidad pero a hacer ver al médico, principalmente al que está en formación, la joya que está depositada en sus manos, nada menos que otro ser humano, y nada más grande que un niño.
    Los países poderosos han hecho desaparecer los rostros de los pacientes, y ahora inculcan a los médicos en formación los rostros de los genes, antes de la descripción del genoma humano, sabíamos algo del cáncer, creíamos que había algo oculto a nuestro entender, con el advenimiento de la descripción del genoma humano, ahora reconocemos que no sabemos nada del cáncer. Por otro lado, la medicina está llena de leyes sí, pero también de resultados atípicos, bias, etc. ¿Porqué los famosos trials que dicen fracasar, no toman como referencia al único caso que sí respondió?, ¿Porqué se descarta?.
    La editorial habla de un hombre con una biblia en las manos, pudo no tenerla, tan solo por su actitud me dio a ver, el amor con el que esperaba desde afuera a su hijo, ello provocó en mi caso, llegar a mi sitio de trabajo e inculcar a los médicos en formación que lo más importante en el diagnóstico es ese primer contacto, en este caso, con los padres y el niño, tal vez de allí puedan salir muchas conclusiones. Por otro lado, esos pacientes que modifican las curvas esperadas no son resultados atípicos, son pacientes, habríamos de ver el motivo de tal fenómeno y no darnos por vencidos, esto se puede llamar esperanza, o investigación científica motivada por la supervivencia larga no esperada de un paciente.
    Finalmente, demos el nombre que demos, el médico es el individuo que más debe saber reconocer el dolor humano y cierro con una frase del gran Dante «Aquí faltó fuerza a mi elevada fantasía, pero fui sostenido por un amor, ese que mueve al sol y a las demás estrellas», porque el sol, esa mañana en verdad, sí que ardía. Saludos cordiales, Isabel Alvarado-Cabrero

  8. Ernesto Sanchez-Hermosillo

    El editorial en este caso, deben de reflejar en este caso el rumbo y sentir de una asociación, son la voz que indica el cambio, el sentimiento, las posturas de un gremio.
    Si vamos a añadir la fe a nuestro arsenal diagnostico-terapeutico para «modificar las matematicas» de los pacientes, creo que es un camino incierto.
    Estoy de acuerdo con la terrible coyuntura que se encuentra la medicina moderna (alópata), plagada de desinformación y de intereses corporativos que tenemos que encontrar nuevas formas de potenciar nuestros conocimientos, pero las cuestiones de fe no creo que sea una de ellas.

    • Svetlana Kotliarova

      Docencia, igual que política y religión, mala combinación. Lo siento pero vamos a dejar cuestiones de la fe para ámbito personal

  9. isabel alvarado-cabrero

    Estimado Dr. Sánchez-Hermosillo,
    Gracias por su comentario, es bello, «voz que indica el cambio, sentimiento y posturas de un gremio, por completo de acuerdo,
    eso es lo que los latinoamericanos somos y debemos consolidar, porque hay gran valía en nuestros países y sirva esta página para
    todos y cada uno de nosotros, para expresarnos, para manifestarnos.
    Trataré de mejorar mi enfoque

    Un abrazo
    Isabel

  10. Gabriela Martínez

    Dra. Alvarado, esto es un claro ejemplo de lo que usted expresó «los hay muchos»…y usualmente no toleran una visión diferente a las suyas.
    Este escenario generalizado casi obliga a no expresar nuestros sentimientos por temor a incomodar a alguien.
    La fé hasta el momento no ha interferido (ni veo por qué lo haría) en mi práctica médico/científica, al contrario, me permite desarrollar una empatía especial con los pacientes.
    Saludos.

  11. Alejandro Saquimux.

    Dra. Isabel Alvarado, gracias por sus palabras puestas en su editorial. Es un mensaje de reflexión sobre la vida y la muerte de nuestros enfermos, la agonía de los padres, familia y amigos de nuestros pacientes. Los patólogos y las patólogas no somos fríos ante el sufrimiento de nuestros pacientes, porque primero somos médicos o médicas. A todos los colegas patólogos les recomiendo leer dos obras para mi son interesantes:

    Dios en el Laboratorio, 53 científicos Nobel que armonizaron fe y razón, de Jacinto Peraire Ferrer, Ediciones Buena Tinta, 2015. Impreso en España.

    ¿Cómo Habla Dios? La Evidencia Científica de la Fe. de Francis S. Collins. 1.a edición en Editorial Ariel: septiembre de 2016, 2.a impresión: febrero 2017, Barcelona, España.

    Saludos desde Guatemala.

    • isabel alvarado-cabrero

      Estimado Dr. Alejandro,
      Muchas gracias por su comentario y más aún por las referencias bibliográficas que nos recomienda, ya me di a la tarea de buscar
      esas joyas . Un saludo a usted y todos mis hermanos guatemaltecos

      Isabel

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