La Sociedad Latinoamericana de Patólogos (SLAP) se fundó en la ciudad de México el 15 de diciembre de 1955, durante la celebración del Primer Congreso Latinoamericano de Anatomía Patológica. Esta reunión se llevó a cabo en el nuevo edificio de la Escuela de Medicina (todavía no era Facultad) de la Ciudad Universitaria, cuando dicha Escuela aun no se cambiaba de su antigua sede en el Palacio de la Inquisición (hoy Palacio de la Medicina), en el Centro Histórico de la Ciudad de México. Tanto la idea original de la SLAP, como la convocatoria enviada a la mayoría de los patólogos latinoamericanos para reunirse y fundarla, fueron obra del Maestro Isaac Costero, quien había llegado a México procedente de España el 15 de agosto de 1937, contratado por el Dr. Ignacio Chávez para dirigir el Laboratorio de Anatomía Patológica del futuro Instituto Nacional de Cardiología (que se inauguró 8 años después, en 1945). Gracias a su eminencia como patólogo, a su amor por la enseñanza y a su enorme simpatía, el Maestro Costero muy pronto adquirió un inmenso prestigio no sólo en México sino en toda América Latina, por lo que la respuesta a su convocatoria fue excelente. A México llegaron muchos de los líderes de la especialidad en América Latina, trayendo la representación y los buenos deseos de todos sus colegas que no pudieron viajar en esa ocasión, pero que se han ido incorporando a la SLAP en tiempos sucesivos. Por aclamación, el Maestro Costero fue nombrado el primer Presidente de la SLAP.
La estructura funcional de la SLAP ha evolucionado a lo largo de los años, pero deben recordarse entre sus secretarios y organizadores de muchas reuniones a Héctor Márquez Monter, a Arturo Rosas Uribe y a Eduardo López Corella. En la fundación de la SLAP participaron más de 100 patólogos y estudiantes (existe una fotografía memorable en donde se cuentan 104 adultos y un niño, pero dos patólogos mexicanos aparecen dos veces…) de casi todos los países latinoamericanos, junto con algunos invitados especiales, como Helwig Hamperl de Alemania, Gustave J. Dammin y John Andujar de los EEUU, entre otros. En una nómina de socios de la SLAP, publicada en la Revista Patología en 1997, se cuentan 284 miembros, pero seguramente son muchos más, porque sólo aparecen los que pagan las cuotas. En ese mismo año se publicó otra nómina más completa, esta vez con 320 miembros.
Desde 1955, la SLAP se ha reunido cada tres o dos años en 27 ocasiones, en distintos países de América Latina (3 veces en México y en Brasil, 2 veces en Perú, Cuba, Venezuela y Argentina, y 1 vez en San Salvador, Ecuador, Bolivia, Puerto Rico, Santo Domingo, Costa Rica, Chile, Panamá, Nicaragua, Uruguay y Guatemala), y la próxima se anuncia otra vez en Brasil. La revista Patología es actualmente la publicación oficial de la SLAP, de la Asociación Mexicana de Patólogos y del Consejo Mexicano de Médicos Anatomopatólogos, se publica en forma casi regular desde hace 48 años, y ha pasado por varias épocas, unas muy buenas y otras no tanto. El primer número apareció en 1957, bajo la dirección de Leandro Potenza (Venezuela), se interrumpió en 1963, se reinició en 1969, ahora dirigida por Carlos Restrepo (Colombia), y desde 1973 se publica en México; entre sus directores mexicanos han figurado Luis Benítez Bribiesca, Eduardo López Corella y Pedro Valencia. Aparte de las reuniones bienales de la SLAP, la revista Patología es el único mecanismo que existe para conservar y cultivar los intereses profesionales comunes de los patólogos de América Latina.